LAS PALABRAS JUSTAS

Antes de subirse al micro, con la amabilidad y paciencia que lo caracteriza, el DT del Deportivo Morón, Alejandro Méndez, ante los micrófonos del Espolón del Gallo arrancó con una reflexión que lo pinta como alguien que tiene los ojos bien abiertos: “Nosotros queríamos otra cosa, no 5 empates. El cero en el arco se traduce en algo que está bien trabajado, pero que quede claro que no vinimos a buscar lo que hoy pasó. La idea es que tengamos una ofensiva de mayor peso, pero bueno, en otros partidos por ahí lo pudimos hacer, pero esta vez no” y luego se mostró optimista: “De todos modos, un empate acá tampoco es malo. Tenemos que ganar y las cosas que estamos haciendo bien, se van a potenciar.” Rescató el trabajo que hizo Federico Iñiguez en su primera incursión en su equipo desde el inicio del encuentro: “Fede” tiene muy buen manejo, es un jugador con mucha claridad cuando tiene la pelota, así que es otro jugador que demuestra que este es un plantel con individualidades importantes.”. Respecto a la modificación a los 5’ del ST del goleador histórico del “gallito” fue, como siempre, muy sincero: “La salida de Akerman fue por una cuestión más táctica que por otra cosa. Necesitábamos tener más peso arriba y si bien Damián en ese momento tal vez se molestó, reaccionó así, es normal que no te guste salir” y despejó cualquier suspicacia de mal humor del jugador –lo demostró con un gesto adusto que evidenciaba su disconformismo por la sustitución- pese a que a nadie le gusta ser reemplazado y menos en un clásico: “A los 2’ del cambio ya estábamos charlando lo más bien. Yo en eso soy tolerante, es lógico que a ningún jugador le guste salir, porque en ese momento hay que estar ahí, con las pulsaciones del partido a mil, pero está todo bien”. Aunque sólo restaba él para subir al micro, tuvo tiempo para responder a los rumores que lo habían puesto en una supuesta cuerda floja durante la semana previa al derby: “Respecto a mi continuidad, estamos todos en el mismo tren. Tenemos que romper la racha y una de las claves para lograrlo es estar con optimismo y unidos, eso es algo importantísimo, y por supuesto, tirando todos para adelante. El día que no sea así, que no camine, se verá, pero esto no es que no camina, nos falta poquito para romper, si rompemos con un triunfo, creo que nos vamos para arriba, entonces, no hay que arruinarlo antes de tiempo. Yo creo que ese el mensaje” y se despachó contra los que hablaron demás: “Los rumores no me molestan. Hay algunos serruchos que trabajan desde el primer minuto, pero eso ya lo sabía desde antes de empezar el campeonato. Son rumores que no tienen las más mínima chance, el más mínimo asidero de tener algo de cierto”. Con relación a lo estrictamente futbolístico, y como una especie de pos data, estuvo en parte de acuerdo con nuestra apreciación relativa a una evidente carencia del equipo en la zona dónde se genera el juego para alimentar a los de arriba: “Puede ser que la falla esté en la gestación del fútbol, estamos viendo… pero hoy sí, es probable que hayamos estado flacos de fútbol, pero en otros partidos también merecimos ganar…”. Luego se retiró, con esa humildad que le permite estar tranquilo con su conciencia, a pesar de la alarmante ausencia de resultados que lo acerquen al objetivo trazado.

Martin Capaccio.